Entrenamiento de la Musculatura Inspiratoria para mejorar la Función Arterial
El entrenamiento IMST puede generar mejoría en la función endotelial.
Actualmente existe muy poca información en relación al potencial que tiene el Entrenamiento de la Fuerza de la Musculatura Inspiratoria (IMST) de alta resistencia para mejorar la función arterial.
El estudio desarrollado por Craighead y col, (2021) ha sido el primero en evaluar este efecto sobre adultos sanos de mediana edad. El parámetro por el que se mide la función arterial es la Dilatación Mediada por el Flujo (FMD).
Observaron un aumento de aproximadamente el 45% en la FMD a nivel de la arteria braquial (FMDBA) tras 6 semanas de IMST de alta resistencia, sin que el grupo control presentase cambio alguno.
Cuando se expresa como un cambio porcentual en el diámetro de la arteria braquial, tras el entrenamiento IMST observaron un aumento del 2,5 Δ% en las unidades de FMDBA.
Esta mejora observada es potencialmente clínicamente significativa, ya que un aumento de 1 Δ% en las unidades de FMDBA se asocia con un riesgo 8-13% menor de enfermedad cardiovascular como ha sido demostrado en estudios previos.
Estas mejoras en la dilatación arterial, fueron observadas tanto en los hombres como en las mujeres posmenopáusicas con deficiencia de estrógenos, que participaron.
Estos hallazgos indican que el entrenamiento IMST a alta resistencia, puede ser una intervención prometedora para mejorar la función endotelial vascular tanto en mujeres posmenopáusicas con deficiencia de estrógenos, un grupo en el que el ejercicio aeróbico regular no mejora sistemáticamente la función endotelial (Seals et al., 2019), como en hombres de mediana edad y mayores.
Este estudio piloto en adultos de mediana edad con una TA inicial superior a la normal demostró aumentos sustanciales de la FMDBA, lo que sugiere fuertemente el potencial de eficacia en este grupo.
La eficacia potencial del IMST de alta resistencia sobre la rigidez arterial sólo se ha evaluado en dos estudios hasta la fecha. Es importante destacar que ambas intervenciones fueron de corta duración. Como las intervenciones sobre el estilo de vida generalmente tardan al menos 3 meses en reducir la rigidez arterial (Pierce, 2017), es posible que se necesiten duraciones de intervención más largas para dilucidar mejor los efectos del IMST de alta resistencia en esta importante expresión de la función vascular.
*artículo basado en el estudio Craighead y col. Time-efficient, high-resistance inspiratory muscle strength training for cardiovascular aging. 2021 Experimental Gerontology 154 (2021) 111515
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